Los datos del desempleo del mes de noviembre siguen demostrando que la reforma laboral y las distintas medidas económicas de subidas de impuestos y recortes llevadas a

Los datos del desempleo del mes de noviembre siguen demostrando que la reforma laboral y las distintas medidas económicas de subidas de impuestos y recortes llevadas a cabo por el gobierno de la nación del PP,  no  están sirviendo para crear empleo ni para reactivar la economía del país. 

 

En Sanlúcar el desempleo ha aumentado un 3´84% respecto al mes de octubre, una vez más, es la ciudad de más de 50.000 habitantes de la provincia donde más ha crecido el paro en términos porcentuales, hasta situarse en 12.724 personas, esto es, 474 nuevos sanluqueños han perdido su trabajo en el mes de noviembre.

 

Estos datos son suficientemente elocuentes y escandalosos de por sí, que ya no se necesitan calificativos algunos para reflejar la realidad económica y social de nuestra ciudad. 

 

Una ciudad con una economía estancada sin industrias, con unos sectores primarios, abandonados a su suerte, incapaces de asumir esta ingente mano de obra desempleada, con un turismo que no termina de despegar cuya oferta se basa exclusivamente en sol y playa incapaz de ofrecer puestos de trabajos estables y de calidad.

 

Una ciudad donde cada vez es más patente los efectos de la economía sumergida, que como se sabe no crea riqueza, salvo para quienes de manera insolidaria se aprovechan de la situación de necesidad de los miles de parados de la ciudad.

 

Esta lamentable realidad económica está provocando un deterioro social, donde esta imperando la ley del más fuerte y, esa otra, de sálvese quien pueda. Prueba de todo ello, son los incidentes ocurrido hace unos días en una operación antidroga en la playa de Bonanza, donde decenas de jóvenes se hicieron con cientos de fardos de drogas desafiando impunemente, hasta hacerlos desistir, a los agentes del servicio de vigilancia aduanera.

 

Ante esta realidad económica y social no cabe actuar como si no pasara nada, tal como hace el equipo de gobierno PSOE-CIS, con una alcaldesa pretendiendo dar soluciones para los problemas de la provincia, pero es incapaz de proponer iniciativas en nuestra ciudad con algo de solvencia, para paliar, en la medida de las competencias del ayuntamiento, los dramáticos efectos de la crisis que están llevando a cientos de familias a la desesperación. Hasta ahora, sus  únicas aportaciones para activar la economía local han sido la construcción de una cafetería en el paseo marítimo y la de un centro de cría de gallos de  pelea.

 

Las políticas activas de empleo en el ayuntamiento siguen sin estar operativas, siendo en estos momentos cuando se hacen más necesaria la ayuda a los desempleados, sobre todo a los jóvenes, en su búsqueda de empleo. Tanto el delegado municipal de Formación y Empleo, Juan Marín, y la propia diputación provincial, lamentablemente, han encontrado en este tema un filón para dirimir sus diferencias no políticas, sino personales. Por otra parte, el delegado municipal sigue incapaz de poner en marcha el servicio recién municipalizado de Orientación al Desempleado, cuando  desde hace meses tiene concedida la aprobación de la subvención del mismo por la Junta de Andalucía.

 

La única respuesta del Equipo de Gobierno PSOE-CIS, además de desentenderse de esta realidad mirando siempre hacia otro sitio, ha sido subir los impuestos locales y recortar servicios municipales. Siendo los recortes más escandalosos los concernientes a los servicios sociales, cuando se hace más necesario que nunca esta ayuda a los cientos de familias sin recursos con todos sus miembros parados.