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El Equipo de Gobierno PSOE-CIS está demostrando que eso de la participación ciudadana es una pose que la saca a pasear exclusivamente en tiempos de campaña electoral, para después olvidarse rápidamente de ella.
A igual de tantas otras promesas electorales incumplidas en la legislatura anterior, y las que no se van a ver cumplidas en ésta, la participación ciudadana lleva todas las papeletas de ser una más. Ya en la legislatura anterior utilizó la participación ciudadana tan solo como medio de propaganda. El Consejo Económico y Social Local, con una composición que lo desvirtuaba, lo convirtió en poco menos que en una reunión de amiguetes dispuestos a alabar cualquiera de las comparecencia insustanciales de los delegados municipales que pasaran por allí. Los distintos consejos locales sectoriales, al igual que el anterior, tan solo sirvieron para que los delegados y delegadas de turno se hicieran la foto de rigor ante los medios de comunicación.
Llevados ya casi diez meses de esta legislatura, el Equipo de Gobierno PSOE-CIS parece que ha decidido dar una nueva vuelta de tuerca a esto de la participación ciudadana en los temas de gestión municipal. Con la excusa de la contención del gasto, en una muy mal entendida política de ahorro, deciden dar carpetazos a dos órganos de participación disolviéndolos, como son el Patronato de Turismo y la Fundación Municipal de Cultura. El Consejo Económico y Social no se ha constituido, muy probablemente para que los presupuestos municipales no pasaran por el trámite comprometido electoralmente. Los consejos sectoriales no se reúnen, y aquel que lo ha hecho, tan solo esta sirviendo para mayor gloria de la figura del delegado municipal.
Para IU, en unos tiempos difíciles de crisis es cuando se hace más necesario la participación ciudadana, para entre todos consensuar las medidas más idóneas para paliar sus efectos. Las organizaciones vecinales, por ejemplo, están para mucho más que para que la delegada de participación se haga una foto con ellos alrededor de una mesa.
Pero, incomprensiblemente, el equipo de gobierno entiende todo lo contrario. Por una parte, ha entrado en un proceso de todo para el pueblo pero sin el pueblo, a modo despotismo, pero en este caso, nada ilustrado; por otra parte, en un absolutismo, que se resume en un conmigo o contra mi, castigando a los que se atreven a discrepar de su forma y modos de hacer política, negándoles el agua y la sal, cortándoles los medios para que puedan desarrollar su labor. Las represalias contra la concejala de su propio partido Mª José Valencia las lleva realizando hace tiempo contra toda aquella organización local que se atreva a discrepar o criticarle lo más mínimo.
IU insta al equipo de gobierno PSOE-CIS a que haga efectiva la participación ciudadana poniendo operativos el Consejo Económico y social y todos los consejos locales sectoriales ya que es un derecho reconocido de todos los ciudadanos.