Desde el 2007 hasta 2011, el gobierno local PSOE-CIS contó con el viento a favor de los gobiernos de la nación, de la Junta de Andalucía y de la Diputación Provincial.

Desde el 2007 hasta 2011, el gobierno local PSOE-CIS contó con el viento a favor de los gobiernos de la nación, de la Junta de Andalucía y de la Diputación Provincial. En ese periodo, no solo no ha sabido, no ha querido o no han podido por incapacidad sacar adelante ninguno de los proyectos electorales estrellas prometidos en 2007 y que volvieron a prometer en 2011, sino que la actitud reivindicativa quedó anestesiada y solo ellos sabrán por qué.

 

Ahora Juan Marín, presa de los nervios por el fiasco que está suponiendo su gestión y por la necesidad de marcar distancias con sus socios de gobierno en la ciudad con miras a su nuevo proyecto político provincial, necesita buscar chivos expiatorios que justifique su incapacidad manifiesta y para ello rescata su actitud reivindicativa. De esta manera, en su delirante huida hacia adelante pretende hacer ver que existe toda una confabulación conspirativa contra el gobierno local PSOE-CIS donde interviene el propio PSOE. Administración central, autonómica y la propia diputación provincial se han puesto de acuerdo para impedir que los proyectos, por ellos prometidos, se hagan realidad.


Así que los accesos a la ciudad, el parque de las piletas, el traslado de la depuradora, el puerto deportivo, la plaza de abastos, el polígono industrial del Perejil, etc. estén pendientes son por culpa de todos menos de él. Lo que le pasa a Juan Marín es que se está asfixiando en el mismo humo que ha estado creando alrededor de su propia gestión.


A diferencia de Chaves, Zapatero y otros muchos incluida la exalcaldesa, y el mismo Marín, nadie de IU de la ciudad y de la provincia entró en la dinámica de promesas a sabiendas que no se podía cumplir y mucho menos Diego Valderas, tal como el propio Marín ha pretendido hacer ver.


Dice Juan Marín que en reunión mantenida con el alcalde sustituto, Víctor Mora, éste le ha transmitido también su malestar con el tratamiento que tiene nuestra ciudad en los presupuestos de la comunidad. De ser cierto esto ¿se habrá atrevido Víctor Mora a transmitirle su malestar por los presupuestos andaluces a Irene García, secretaria general provincial del PSOE y antecesora en el cargo que ahora ostenta? ¿Habrá sido capaz de echárselo en cara al consejero de presidencia, al también gaditano natural de Bornos, Manuel Jimenez Barrios?


IU cree que las palabras llenas de demagogia y populismo, como de costumbre, de Juan Marín, aunque ha pretendido salvar de toda responsabilidad a su socio de gobierno para no poder en peligro su sueldo, ha puesto en verdadero aprieto al alcalde sustituto, Víctor Mora. Porque si es falso lo que dice Marín, debe desautorizarlo y destituirlo inmediatamente y si es verdad, supone un reconocimiento público de su incapacidad y la de la exalcaldesa y actual secretaria general provincial para influir dentro de su propio partido para conseguir inversiones para nuestra ciudad.


En cualquier caso, si Mora opta por el silencio, estará dando pábulo a quienes dicen que tan solo es alcalde sustituto, y que está siendo en todo momento rehén, hasta el punto de permitir criticas a su propio partido, de quien al parecer decide lo que se dice y hace desde alcaldía.