IU Sanlúcar en no pocas ocasiones ha manifestado su propuesta de disolución de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) por varias razones.
IU Sanlúcar en no pocas ocasiones ha manifestado su propuesta de disolución de la Gerencia Municipal de Urbanismo (GMU) por varias razones. Por una parte, por el elevado coste económico que supone mantener duplicidades como una doble contabilidad, dos intervenciones de gastos, dos secretarías generales, dos unidades de contratación, dos unidades de personal…
Por otra parte, por el enfoque que le han ido dando PSOE, PP, PA y CIS. Desde su creación, la GMU no ha estado y sigue no estando al servicio del interés general sino al servicio de determinados poderes fácticos económicos locales, portándose más bien como su asesoría particular. Si la crisis económica hace que el Ayuntamiento tenga que ahorrar dinero entendemos que en los gastos de gestión del urbanismo se puede ahorrar. Donde no debemos ahorrar es en el gasto social o en los servicios públicos como la limpieza.
Tampoco debemos olvidar que se ha utilizado como agencia de colocación por los sucesivos gobiernos locales del PP y PSOE. Opinión ésta cada vez más extendida entre los sanluqueños. Estamos ante una plantilla de laborales con contratos de interinidad que, en un 90%, no han pasado pruebas objetivas para su contratación. Estamos hablando de responsables con altas nóminas y que se eligieron a través de valoración de currículos o de entrevistas. En muchos casos de esta plantilla no se cumplieron los principios constitucionales de igualdad, capacidad, mérito y publicidad. Antonio Maíllo explicó muy bien el criterio que tuvo IU cuando gestionó la antigua Empresa Pública del Suelo de Andalucía y cesó a más de 80 altos cargos; “Quien entra a dedo también sale a dedo”.
Todas estas razones y algunas más llevan a IU Sanlúcar a proponer su disolución para posteriormente crear el Área de Urbanismo del Ayuntamiento, en la que se integrará todo aquel personal de la GMU que entrase mediante pruebas selectivas objetivas, abriéndose un proceso de selección de personal mediante oposiciones libres, limpias y democráticas para completar el número de efectivos que se estime adecuado. Quien ha entrado a dedo caprichoso del político de turno debe salir al dictado del dedo democrático.
IU Sanlúcar con estas medidas no pone en tela de juicio la profesionalidad de los trabajadores de la GMU, solo manifestamos que una propuesta política para mejorar el urbanismo y su gestión en la ciudad. Los trabajadores de la GMU deben pensar que sus verdaderos enemigos son los que hacen que los ciudadanos desconfíen de la GMU y no en quienes queremos poner remedio a ello. En cualquier caso, si desde la GMU se reacciona con demasiada sensibilidad a las críticas, obviando que se deben a los ciudadanos quienes pagan sus sueldos, ¿cómo debería reaccionar un ciudadano o ciudadana a la que se le va a derribar su única vivienda o a la que se le comunica que tiene que derribar su vivienda para que posteriormente pueda construirla de nuevo?
La actual gerente de la GMU entró como técnico para poco después ponerse al servicio partidista de una opción política, ya que es miembro de la ejecutiva local del PSOE, por lo que no podemos esperar de ella una estricta gestión profesional objetiva al servicio del interés general, estará siempre mediatizada por su cargo político. Algo parecido le ocurre al jefe de planeamiento de la GMU por su condición de responsable del PSOE de Rota.
Para IU Sanlúcar hay ejemplos suficientes que hacen dudar de la eficiencia y eficacia de la GMU, sobre todo en estos últimos 8 años de gobierno de PSOE y CIS. La inexistente disciplina urbanística, la nula protección del patrimonio histórico artístico, la falta de respuesta al problema de las viviendas irregulares, etc., procedimientos cuya complejidad no pueden justificar la ineficacia e ineficiencia del ente. Lo cierto es que cada vez es más extendido que los ciudadanos vean a la GMU más como un problema que como una verdadera herramienta para solucionar sus problemas.