Víctor Mora lleva en el gobierno de la ciudad más de 11 años, los mismos que Sanlúcar encabeza todos los ranking socioeconómicos como ciudad con más desempleo (33,1%), con mayor pobreza, con mayor tasa de población en riesgo de exclusión social.

 

26/06/2018.- Recientemente un informe de INE refleja que Sanlúcar sigue siendo la ciudad con más de 50 mil habitantes con menor renta per cápita, lo que le lleva según el informe, a ser la ciudad con menor esperanza de vida del país.

Esta triste realidad, en vez de espolear al alcalde Víctor Mora y compañía, en la búsqueda de soluciones que pueda paliarla, solo sirve para que desde el gobierno local, utilicen los escasos recursos municipales que dedica a los colapsados servicios municipales por la alta demanda, mirando más el rédito político que en mejorar la situación de miles de personas afectadas por el paro, la pobreza y la exclusión social.

El alcalde, no en pocas ocasiones ha hecho gala de su consabida insensibilidad social, desoyendo las demandas urgentes de ayudas a personas, familias con menores a cargo de ayudas y atención, cuando no intentando criminalizar a colectivos desfavorecidos social y económicamente como las Corralas denunciándolas en los juzgados en un intento de amedrentarlas.

Mucho de esto hay en la denuncia interpuesta por el Ayuntamiento contra las mujeres y hombres, que en su desesperación al ser desahuciados sin que el ayuntamiento les diera solución y alternativa alguna a dormir en la calle, decidieron encerrarse pacíficamente en la biblioteca municipal para exigir una solución a su situación de desamparo.

En este encierro, las familias estuvieron acompañadas por concejales y concejalas de IU y PSSSP, sin embargo, ninguno de ellos han sido denunciados por tal motivo. Lo que indica que el alcalde solo esta preocupado por el escarmiento a las familias desesperadas que se encerraron en la biblioteca municipal para que no cunda el ejemplo en otras personas y familias en similar situación.

Esta es práctica habitual del alcalde del paro, de la pobreza, de la exclusión social que en vez de dedicar recursos municipales en paliar esa situación, no escatima recursos municipales en criminalizar y amedrentar a quienes critican y denuncian la situación de desamparo que sufre en la ciudad.

IU seguirá al lado de las mujeres y hombres denunciados injustamente y reta al alcalde que emprenda igualmente denuncia contra los concejales y concejalas que, cumpliendo con su obligación, estuvieron en el encierro de la biblioteca, denunciando la prepotencia e insensibilidad de un alcalde, únicamente preocupado por mantener sus 40, 45 o 90 mil poderosas razones para no dimitir.