El CIS, en esta ocasión en boca de su secretaria de organización, María Jesús Herencia, sigue empleándose en hacerle el trabajo sucio al PSOE de Irene García diciendo mentiras y medias verdades tod

El CIS, en esta ocasión en boca de su secretaria de organización, María Jesús Herencia, sigue empleándose en hacerle el trabajo sucio al PSOE de Irene García diciendo mentiras y medias verdades todo ello arropado con la consabida demagogia e indocumentación de costumbre respecto a la liquidación de la Mancomunidad de Municipios del Bajo Guadalquivir.

 

Llevan siete años gobernando la ciudad junto al PSOE, los mismos años que llevan consintiendo a modo de cómplices necesarios todos los desmanes económicos, financieros y sociales llevados a cabo en la mancomunidad y del poco rendimiento para la ciudad a pesar de representar el 31% de la mancomunidad, otros municipios con mucho menos participación si supieron sacar rendimiento a la mancomunidad, como afirmó nuestro coordinador provincial, Manuel Cárdenas, en rueda de prensa. Estos datos el CIS lo obvia interesadamente en todas sus comparecencias públicas.

 

La deuda que le corresponde a Sanlúcar es de aproximadamente 14 millones de euros. De ellos 10 millones de euros corresponden a gastos de funcionamiento de la mancomunidad, deuda absolutamente aceptada por PSOE y CIS. Los 4 millones restantes son deudas debida a servicios específicos, que por falta de una contabilidad separada de los mismos, se imputa a todos los ayuntamientos miembros según su porcentaje de población, en el caso de Sanlúcar el 31%. Aquí es donde esta la discrepancia de Irene García y Juan Marín. En esto consiste la verdad a media, se dice la deuda global pero no se explica su desglose.

 

A IU lo único que le ata es la defensa de los intereses generales de los ciudadanos a diferencia de otros que llevan siete años atados en la defensa exclusivamente del sueldo que por su actividad política le proporciona el ayuntamiento.

 

Mucho nos tememos que después del ruido mediático y las amenazas de llevar este asunto a la Cámara de Cuentas y a la Fiscalía todo se quedará en aguas de borrajas y llegado el momento buscaran una excusa para no hacerlo, porque eso sería sentar en el banquillo a la alcaldesa, Irene García, y el CIS lleva demostrando suficientemente durante siete años que con las cosas de comer de sus tres concejales, incluido el pluriempleado, y de su nutrido grupo de funcionarios de empleo, no se juega. 

 

Parafraseando a José María Calleja podemos decir sin equivocarnos que PSOE-CIS hacen una política que camina a horcajadas entre la consideración de los sanluqueños como idiotas y la certeza de que hay que repetir la mentira hasta que, por saturación, sustituya a la realidad.


El CIS más allá de lloros sentimentaloides y de las pretendidas lecciones de ciudadanía y regeneración democrática, no están en situación de pedir explicaciones a nadie, son ellos los que deben dar todas clases de explicaciones de porqué después de siete años de gobierno la ciudad sigue estando igual o peor en todos los aspectos económicos, sociales, laborales, en infraestructuras, en inversiones, etc sin que la deuda de la mancomunidad haya tenido que ver algo en ello.