La alcaldesa, Irene García, en su irresponsable huida hacia delante intenta convencer a los sanluqueños que la situación económica del ayuntamiento ha mejorado en los ú

La alcaldesa, Irene García, en su irresponsable huida hacia delante intenta convencer a los sanluqueños que la situación económica del ayuntamiento ha mejorado en los últimos años. El portavoz municipal de IU, Rafael Terán, en reiteradas ocasiones ha demostrado que no es verdad. Los años 2007, 2008, 2009 y 2010 se liquidaron con déficit, llevando la situación económica del consistorio prácticamente a la quiebra.

 

Solo basta darse una vuelta por la ciudad para ver el estado de abandono de muchas zonas de la misma, debido a la quiebra técnica del ayuntamiento como consecuencia de la desastrosa gestión económica de Irene García. La realidad es tozuda por mucho que se quiera maquillar o mentir sobre las cuentas del ayuntamiento. 

 

El análisis de la liquidación del presupuesto de 2011 demuestra que nuevamente termina con déficit, todo ello a pesar de las abusivas e injustificadas subidas de impuestos y tasa municipales llevadas a cabo (el IBI ha subido un 12%).  Se ha ingresado 50,5 millones y se han gastado 52,9 millones de euros, descontando el ingreso extraordinario de 3,3 millones de Aqualia, el déficit es de 2,4 millones de euros que representa el 4,75%. El estado solo admite un déficit del 4,39% (2,21 millones de €).

 

Ello quiere decir que el plan económico financiero 2009/2011, aprobado por ellos mismos, no se ha cumplido. Ahora tienen que aprobar un nuevo plan económico financiero que requerirá nuevas subidas de impuestos y nuevos recortes, que será incumplido nuevamente, representando un nuevo fracaso en su gestión económica del ayuntamiento.

 

Todos estos indicadores se completan con un incremento del remanente negativo de tesorería (RNT) de más de casi un millón, situándose en -94 millones de euros. Y eso sin contar con las “facturas en los cajones”, es decir, las deudas contabilizadas que no tienen cobertura presupuestaria, ascendiendo su saldo nada más ni nada menos  a 7.911.235,01 € que reflejan claramente que la austeridad es tan solo una pose propagandística.

 

Para Irene García y la delegada municipal de economía, Inmaculada Muñoz, la única política de austeridad que entienden es la que se basa en la subida de impuestos y la reducción en cantidad y calidad de los servicios municipales. Pidiendo continuos esfuerzos a los ciudadanos pero negándose, a su vez, bajarse sus propios salarios. 

 

Después de más de seis años gobernando la ciudad, la lamentable realidad económica y social de la ciudad es responsabilidad exclusivamente de la gestión realizada por el PSOE y su socio de gobierno el CIS y ya no cabe echar las culpas a la herencia recibida, porque ellos ya la han heredado de ellos mismos.

 

Para Rafael Terán, es el momento de tomar las medidas de austeridad necesarias para afrontar el verdadero problema económico del ayuntamiento, como es la disolución de la Gerencia Municipal de Urbanismo, órgano que nunca ha demostrado su utilidad en el desarrollo racional del urbanismo y que sobre todo se ha mostrado incapaz de establecer una mínima disciplina urbanística en la ciudad, además de ser muy costoso para las arcas del consistorio. Si esta solución no es del agrado de Irene García ni del PSOE, entonces debe plantear soluciones viables y no paños calientes como hasta ahora. No es el momento de esconder la cabeza bajo el ala ni de seguir engañando a los ciudadanos, sino de tomar medidas responsablemente.