El PSOE utilizó la Mancomunidad de Municipios del Bajo Guadalquivir como una herramienta al servicio de sus necesidades partidistas para, entre otras cosas, poder ubicar a sus compromisos políticos

El PSOE utilizó la Mancomunidad de Municipios del Bajo Guadalquivir como una herramienta al servicio de sus necesidades partidistas para, entre otras cosas, poder ubicar a sus compromisos políticos y personales muy generosamente retribuidos.

 

Algo parecido pretendió llevar a cabo la alcaldesa, Irene García, en el Grupo de Desarrollo Rural Costa Noroeste (GDR Costa Noroeste) hasta que IU Sanlúcar denunció todo ese despropósito.

 

El Grupo de Desarrollo Rural Costa Noroeste pudo ser una herramienta eficaz para desarrollar proyectos que redundará en la mejora de la calidad de vida de los habitantes del ámbito rural de la Costa Noroeste en general y de Sanlúcar en particular, si no fuera porque Irene García lo quiso convertir en un chiringuito para dar cobertura a sus compromisos personales y políticos poniendo en practica todo aquello que pudo haber aprendido en la mancomunidad. 

 

El GDR Costa Noroeste estaba conceptuado para que funcionase con tres técnicos y una gerente como responsable del grupo. Los ayuntamientos de Rota, Chipiona y Trebujena eligieron a un técnico en la materia que se preocupase con solvencia por sus territorios en el GDR. El PSOE de Sanlúcar actuó de otra forma; vio en este asunto la oportunidad de colocar como gerente del GDR Costa Noroeste a Doña Mercedes Gómez Pérez sin titulación relacionada con el puesto cuyo único merito era ser prima del exjefe de gabinete de alcaldía y responsable de organización del PSOE de Sanlúcar, Fernando Verdún, a la sazón dimitido o echado de sus cargos posteriormente.

 

Además  decide contratar a dos personas más, convenientemente elegidas, no por sus capacidades técnicas sino para aunar apoyos entorno a la alcaldesa para su ansiado ascenso político en su partido.

 

Como consecuencia de la denuncia pública realizada por IU Sanlúcar al respecto, Irene García, presidenta del GDR y alcaldesa de Sanlúcar, sin explicación alguna, decide de prisa y corriendo cesar a su Jefe de Gabinete, a la señora gerente, así como despedir a los contratados en la GDR relacionados con el PSOE de Bornos, más preocupada de que el asunto no le salpicara políticamente que de intentar resolver el desaguisado y reconducir la desastrosa gestión para que los fondos europeos con que estaba dotados, cerca de tres millones de euros, no se perdieran.

 

Ahora, como ya no puede utilizarse la GDR Costa Noroeste como chiringuito, el desinterés de la alcaldesa, Irene García por esta útil herramienta de desarrollo y cohesión social en el ámbito rural  es patente y manifiesto, y ha permitido que el GDR Costa Noroeste desaparezca como tal al ser absorbido por el GDR Jerez.

 

Por estas razones, cuando a la alcaldesa se le nombra el GDR Costa Noroeste se pone nerviosa hasta el punto de perder los papeles como le ocurrió en el pasado pleno municipal, faltando gravemente al respeto a un concejal del grupo municipal de IU.

 

Algo parecido esta pasando en la Residencia de Ancianos y en la Gerencia Municipal de Urbanismo donde los gerentes y el jefe de planeamiento son miembros de las ejecutivas locales de Sanlúcar y de Rota, respectivamente.

 

Este es el concepto de defensa de los intereses de los sanluqueños que tiene la alcaldesa y el resto de su equipo de gobierno, es decir, la “familia” primero y los intereses generales después, si queda algo y por eso IU Sanlúcar seguirá denunciando la demagogia y los intentos burdos por su parte de intentar culpar a otros de su pésima gestión de esos mismos intereses.