IU viene denunciando como la empresa concesionaria del servicio del ciclo integral del agua, Aqualia, esta incumpliendo sistemáticamente el pliego de condiciones por el cual se hizo cargo del servi
IU viene denunciando como la empresa concesionaria del servicio del ciclo integral del agua, Aqualia, esta incumpliendo sistemáticamente el pliego de condiciones por el cual se hizo cargo del servicio con la presunta connivencia del Equipo de Gobierno PSOE-CIS.
A través de un informe municipal supimos que Aqualia está vertiendo aguas residuales al río sin la adecuada depuración. Que en el colmo de los desatinos se justifica este hecho por las obras que esta llevando cabo la concesionaria contratadas por el ayuntamiento por valor de 2´7 millones de euros. Esto quiero decir, que además de los beneficios que le estarán reportando la realización de dichas obras, se esta ahorrando gastos porque no esta depurando adecuadamente y sin embargo esta cobrando impunemente a los sanluqueños un servicio que no se esta prestando.
Igualmente hemos sabido que Aqualia ha traslado trabajadores de Sanlúcar a otras localidades de la provincia, contraviniendo lo estipulado en el pliego de condiciones en este sentido, conllevando una perdida en la calidad del servicio que se presta.
La única preocupación mostrada hasta ahora por la empresa concesionaria por mejorar las infraestructuras ha sido por la evitar las fugas, lógicamente porque era la única perjudicada, sin embargo el olvido por mejorar el sistema de abastecimiento al usuario, la potabilización del agua apta para el consumo y la red de saneamiento esta siendo clamoroso, a pesar de las cuantiosas obras encargas por el ayuntamiento sin que los sanluqueños apreciemos mejores en cada uno de estos aspectos referidos. Ejemplos de todo ello, son los continuos cortes de agua, las quejas de la baja calidad del agua potable y las tristemente tradicionales inundaciones cada vez que llueve.
Detrás de esta presunta impunidad con que parece actuar Aqualia en la prestación de los servicios esta la dejación incomprensible por parte del ayuntamiento de su obligación fiscalizadora del cumplimiento del pliego de condiciones. Por eso nadie puede entender porqué aún no existe un mecanismo municipal de control del servicio que presta Aqualia que pueda evitar esa deriva de incumplimientos del servicio en sus aspectos técnicos y administrativos que venimos denunciando.
Los silencios de la alcaldesa y de la propia empresa concesionaria ante las denuncias que viene haciendo IU respecto a las deficiencias del servicio que se presta por el ciclo integral del agua, suponen un desprecio absoluto a los sanluqueños por ambas partes, que solo están sirviendo para que el zurrón de las sospechas haga explotar la indignación popular al comprobar que la privatización del servicio ha supuesto, una vez más, además del injustificado encarecimiento del mismo y que se le esté cobrando por un servicio que no recibe, una pérdida de la calidad de un servicio elemental que afecta de forma importante a la salud de las personas así como al medioambiente.