El gobierno de la nación del PP sigue en su intención de eliminar servicios que venían prestando a los contribuyentes.
El gobierno de la nación del PP sigue en su intención de eliminar servicios que venían prestando a los contribuyentes. Este plan, iniciado por el gobierno socialista de Zapatero y que Rajoy continua intensificando, supone un cambio diametralmente opuesto a la filosofía de acercar la administración a los administrados, ahora se impone la reducción del coste del servicio sobre cualquier otra consideración del mismo, como la de facilitar los medios necesarios a los contribuyentes para cumplir con su obligación con el fisco.
La Agencia Tributaria ha dado una nueva vuelta de tuerca a su plan de reorganización de las administraciones y procedimientos decidiendo que a partir de 1 de enero de 2014 gran parte de la presentación de autoliquidaciones y declaraciones se tengan que hacer obligatoriamente por internet, poniendo en marcha procedimientos que lejos de simplificar y facilitar los trámites los complican indefectiblemente a los contribuyentes.
Esta medida, que se hace con el pretexto de facilitarles los trámites a los contribuyentes, lo que esconde es un abaratamiento del servicio que se presta a costa de dar una peor atención a los contribuyentes, sobre todo, a aquellos que realizan algún tipo de actividad económica. Éstos, de manera obligatoria, tendrán que presentar sus autoliquidaciones por internet, lo que significa que aquellos que no sepan o no puedan acceder a internet, tendrán que acudir a los asesores, ocasionando un sobre coste a sus actividades profesionales o empresariales, ya que no podrán hacerlo en papel como hasta ahora.
Los dirigentes de la Agencia Tributaria, ajenos a la realidad desde sus cómodos y plácidos despachos, creen que todo el mundo tiene la capacidad, facilidad y conocimientos de acceder a internet y no miran más allá las consecuencias de sus decisiones sobre los contribuyentes, sobre todo en unos momentos de crisis económica que está ocasionando el cierre de miles de pequeñas y medianas empresas así como el abandono de su actividad a miles de autónomos.
Los contribuyentes sanluqueños ya saben que hace tiempo para atender cualquier incidencia respecto al impuesto del IVA o respecto al Impuesto de Sociedades, ya no lo pueden hacer en la administración de la Agencia Tributaria de nuestra ciudad, sino que se tienen que desplazar a la del Puerto de Santa de María, cuya administración de la Agencia Tributaria ahora es la competente en esas materias.
Este año pasado, los sanluqueñas y sanluqueñas que tenían la obligación de hacer la declaración de la renta y quieran hacer uso del servicio gratuito que pone a disposición la Agencia Tributaria para la confección de la declaración de la renta por las tardes, tuvieron que desplazarse a otras localidades como Jerez o el Puerto de Santa María, ya que la Agencia Tributaria ha decidido no dar este servicio en nuestra ciudad.
IU Sanlúcar rechaza esta decisión de los responsables de la Agencia Tributaria, que conlleva un perjuicio evidente a los sanluqueños y sanluqueñas al privarles del servicio que se venía prestando hasta ahora y del que se estaba muy satisfecho. Mucho nos tememos que en la deriva de recortes se termine en un cierre de hecho de la administración tributaria en nuestra ciudad, así como otras muchas a lo largo de toda la geografía de nuestro país, con la pérdida de puestos de trabajo que ello conllevará.