En las recientes elecciones al Parlamento Europeo quedó claro que son los sanluqueños quienes no confían en Marín (CIS). Tan solo obtuvo 524 votos los que obtuvo su partido.

En las recientes elecciones al Parlamento Europeo quedó claro que son los sanluqueños quienes no confían en Marín (CIS). Tan solo obtuvo 524 votos los que obtuvo su partido. Mientras que IU obtuvo el mejor resultado de su historia en unas europeas, situándose como la segunda fuerza política de la ciudad.

Esta patente pérdida de credibilidad de Marín, Reyes y Sumariva es lógica  y previsible. Como se espera que se fíen de quien dijo aquello de que no pactaría con nadie para formar gobierno y de quien dijo aquello de que llegaba para regenerar la política local. Olvidó todo lo dicho en el mismo momento que se sentó en el pleno municipal y empezó a cobrar  como delegado de los fondos municipales.

Marín es conocido por sus continuos cambios de opinión en función de los vientos que soplen: Casa Arizon, Dragado del Río, Mancomunidad del Guadalquivir, Plaza de Abastos, Centro Comercial Abierto, son buenos ejemplos de ello.

Marín es especialista en ponerse de perfil en cuanto un tema puede comprometer su estatuto de peón de brega dentro del equipo de gobierno: GDR Costa de Noroeste, Cuadro de la exalcaldesa, Aqualia; son también buenos ejemplos de ello.

Hacen bien, Marín, Reyes y Sumariva en no fiarse de los concejales del grupo municipal de IU, porque siempre que tengan oportunidad, evidenciarán la incapacidad e inoperancia que tienen para sacar los verdaderos asuntos de interés para los sanluqueños.

En el pleno municipal del jueves pasado los concejales de IU dejaron al descubierto la consabida demagogia de Marín cuando se le dijo que no era creíble pedir bajada de impuestos del IVA al gobierno de Rajoy mientras que sube los impuestos municipales al máximo legal y que no puede pedir la retirada de la Ley de Reforma de la Administración Local cuando practica las mismas políticas de recortes, subidas de impuestos y despidos de trabajadores que el PP de Rajoy con esa ley propone.

Una vez más podemos decir que Juan Marín miente, cuando dice en una nota de prensa que IU votó en contra de las mociones presentada por su grupo. Probablemente eso es lo que deseaba y le ha traicionado, una vez más, el subconsciente. IU defiende la reducción del IVA al 10% para el sector de la peluquería y la imagen personal y por eso votó a favor de la moción y también exige la retirada de la Ley de la Reforma de la Administración Local aprobada por el PP, lo que pasa es que IU demostró que Marín es capaz de defender una cosa y lo contrario al mismo tiempo sin inmutarse.