Nuevamente, el equipo de gobierno PSOE-CIS con el alcalde al frente responde con insultos y descalificaciones personales a una crítica política de IU Sanlúcar.
Nuevamente, el equipo de gobierno PSOE-CIS con el alcalde al frente responde con insultos y descalificaciones personales a una crítica política de IU Sanlúcar.
IU Sanlúcar, al comparar los sueldos que cobran el alcalde Víctor Mora, y la delegada de Economía y Hacienda, Inmaculada Muñoz, (100.000 euros anuales entre los dos) con el dinero que pretenden emplear en el plan de empleo municipal, 300.000 euros anuales, ha puesto en evidencia la poca o escasa preocupación de estos señores por los miles de desempleados de la ciudad y a falta de argumentos políticos han recurrido, como otras veces, al insulto y a la descalificación personal, en este caso, en las personas de los compañeros Rafael Terán y Fernando Cabral, concejales de IU en el Ayuntamiento. Al parecer, a Víctor Mora no le molesta que se le critique el pírrico presupuesto municipal para un plan de empleo en la ciudad con más de 16.000 desempleados, sino lo que le molesta sobremanera es que se lo compare con su sueldo y el de la delegada de Economía y Hacienda.
En IU Sanlúcar existe un compromiso firme referente a que los cargos públicos deben cobrar lo mismo que en sus trabajos anteriores a la dedicación política. No sabemos si muchos ediles del equipo de gobierno PSOE-CIS, incluido el alcalde, Víctor Mora, serían capaces de contraer este compromiso. En IU Sanlúcar creemos que a la política se llega con espíritu de servicio público, pero no como herramienta para buscarse un sustento económico o para sanearse la economía personal y familiar, mucho de esto deben saber en el equipo de gobierno PSOE-CIS, sobre todo el señor alcalde.
Es posible que Rafael Terán cobre lo mismo que el alcalde, con la diferencia de que él cobra lo mismo que en su trabajo anterior, es decir, cuando era funcionario en el Ayuntamiento. Terán cobra lo mismo que los demás SGP de la Junta en las ocho provincias de todas las Consejerías, ni más ni menos. No creemos que Víctor Mora cobre lo mismo antes como teniente de alcaldesa y ahora como alcalde que en su trabajo anterior fuera de la política. Fernando Cabral cobra lo normal para una persona que ha ganado una oposición en la administración general del Estado, cosa que Víctor no ha podido hacer.
Los ingresos de todos los concejales de IU Sanlúcar están a disposición de quienes quieran consultarlo en la página web de nuestra organización, cumpliendo el compromiso de transparencia adquirido con los sanluqueños. No sabemos si el conjunto de ediles del equipo de gobierno PSOE-CIS están en disposición de hacer lo mismo. Este es un gesto de transparencia necesario para recuperar la confianza de los ciudadanos en la política y en los políticos, aunque no suficiente, por supuesto, porque además hay que gestionar en defensa del interés general haciendo participar a los ciudadanos en la gestión municipal. Y ni una ni la otra están haciendo Víctor Mora y sus ediles en el gobierno local
Alguien cuya primera decisión como alcalde es subirse el sueldo de 40.000 a 50.000 euros, no esta capacitado para dar ninguna lección de ningún tipo, sobre todo cuando pretende hacer ver lo maravilloso que es dedicar 300.000 euros para un plan municipal de empleo, mientras entre todos lo miembros del equipo de gobierno cuestan al ayuntamiento 410.000 euros anuales, sin contar los gastos en seguridad social.
Un presupuesto municipal de algo más de 52 millones de euros, dedica a la atención de los desempleados 300.000 euros, es decir, tan solo un 0,57% del presupuesto municipal es para atender a más de 16.000 parados que hay en la ciudad. Mientras que el sueldo de los 12 miembros del equipo de gobierno PSOE-CIS representa el 1,7% del presupuesto total.
IU Sanlúcar, aunque le pese a Mora y al resto del equipo de gobierno PSOE-CIS, nunca podrá votar a favor de un presupuesto que recoja estos despropósitos con subidas indiscriminadas de impuestos, recortes en servicios, despidos de trabajadores y ninguna inversión municipal en infraestructuras y en el que se invierta más en propaganda y publicidad que en un plan de empleo municipal.